El rostro luce hidratado,y casi sin maquillaje. Atrás dejamos las grandes correcciones que en temporadas pasadas se confundían con líneas en el rostro. Ahora, la naturalidad está de moda. Utiliza fondos de maquillaje ligeros, que difuminen las imperfecciones, pero que no las tapen del todo, los rostros mate van despareciendo, para dar paso a acabados más jugosos y ligeramente satinados.
Las miradas se intensifican, marcadas en negro, con sombra, liner o lápiz, todo vale, pero eso si, muy intenso. inspirados en la tendencia gótica, pero renovada, el negro se instaura en los ojos como el color de la temporada. Desde el efecto humo, hasta el charol más intenso. Es tiempo de NEGRO.
Complementa el negro, con colores propios del otoño, dorados, naranjas, oxido, granates y topo.
Eyeliners fuertes y marcados, ascendentes, rectos... pero siempre respetando la forma de propio ojo. La longitud y el grosor lo eliges tu, pero delinea siempre entre pestañas, para que la densidad de las mismas sea mayor.
Las cejas rectas y anchas, cejas muy geométricas y masculinas, pero al mismo tiempo muy sensuales y sofisticadas.
Las mejillas se tiñen de rojizos mate, y teja intenso. Los tonos oxido, dan color al rostro y quitan el protagonismo de el antiestético "contouring".
Para los labios, rojos, borgoña, morados, vino y ladrillo, hazte con estos colores si quieres ir a la última esta temporada.
vistiendodelarenta.
Imágenes: M·A·C Cosmetics, Vogue, Glamour, archivo web.
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